A las puertas del Día Internacional de la Mujer, Barcelona acogió ayer en el Palacio Macaya el debate previo al III Congreso Internacional Edificar la Paz en el Siglo XXI (26, 27 y 28 de junio, República Dominicana) dedicado al eje temático Mujer y paz. Un acto que sirvió para reivindicar el papel de la mujer como constructora de paz, su derecho a formar parte de las mesas de negociaciones y una menor victimización de su figura en los conflictos.
Tica Font, directora del Institut Internacional Català per la Pau (ICIP), recordó que las mujeres son “el alma de las relaciones humanas” y por eso mayoritariamente trabajan para superar las enemistades, generar puentes y buscar puntos de comunión. Pero además, “como saben que es ser excluida por su condición de género” apuestan generalmente por la no-violencia, la escucha, el diálogo, la cooperación y la prevención y “siempre lo hacen desde la práctica y no la filosofía”.
La directora del ICIP concretó su intervención en tres demandas. En primer lugar, pidió un mayor reconocimiento de la mujer en los procesos de construcción de paz, porque mientras hoy “los hombres ponen los medios para hacer la paz, las mujeres hacen posible la paz”. Y denunció que en este momento las mujeres solo son invitadas como “floreros decorativos” en las mesas de negociaciones de los acuerdos de paz, pero cuando estos terminan, son ellas, en sus respectivas comunidades, quienes vuelven a tejer relaciones sociales.
En segundo lugar, Font hizo una llamada al mundo universitario y académico para que “amplíen el concepto de construcción de paz” más allá de las área de ciencias políticas y relaciones internacionales y tengan también en cuenta los movimientos de pacificación que se producen en la base de la sociedad; de este modo analizaran la actividad de las mujeres, actualmente excluidas de todos los estudios porqué generalmente tienen lugar en “la trastienda” y en el ámbito más popular.
Finalmente, Font insistió en que la mujer es “protagonista y actriz” de la construcción de la paz, un papel que muchas veces se desvirtúa en pro de la victimización. “Si sólo nos fijamos en la mujer como víctima de los conflictos tapamos su capacidad de resiliencia. Las agresiones contra las mujeres no se pueden silenciar, pero tampoco pueden ocupar todo el espacio”, advirtió.
A pesar de estas tres reivindicaciones, al final de su intervención, Font también constató que “no todas las mujeres son constructoras de paz”, ya que, por ejemplo, un “tercio de los guerrilleros colombianos son mujeres”.
La mujer en República Dominicana
Por su lado, Thelma Álvarez, directora de documentales sobre la sociedad caribeña, aseguró que actualmente “en República Dominicana se visualiza a la mujer con una carga de estereotipos y prejuicios cosa que provoca mayor violencia y nos aleja de la paz” y denunció que en su país las mujeres son educadas en un modelo de miedo y sociedad machista, que muchas veces la propia mujer perpetua. Según la ONU una de cada tres mujeres dominicanas tiende a experimentar violencia verbal o física a lo largo de su vida.
Álvarez alertó de la discriminación de la mujer dominicana en muchos ámbitos, por ejemplo, el laboral. “La mujer dominicana ingresa de manera masiva a las universidades pero esto no es motivo suficiente para su desarrollo en el ámbito laboral por prejuicios y discriminación: un 51% de las mujeres están ocupadas en el mercado informal por lo cual crecen los niveles de vulnerabilidad, inseguridad laboral y desprotección social”, explicó.
Delante de esta realidad, la experta en comunicación, reclamó “la necesidad de un plan nacional que motive a la igualdad y la equidad de Género”, que ayude a la promoción de la mujer y su empoderamiento, a favorecer el acceso de las mujeres a los servicios, a erradicar cualquier forma de violencia o promover la participación de las mujeres en la sociedad y un plan de publicidad que sea plataforma de un mejoramiento de las vidas de las mujeres dominicanas.
Antes de las intervenciones de las dos ponentes Maria Viñas, patrón-delegada de la Fundación Carta de la Paz, recordó a los asistentes que la voluntad de los congresos internacionales Edificar la Paz es reunir los tres actores clave entorno el debate de la construcción de la paz: la universidad, el movimiento por la paz y la sociedad civil. Y destacó que los más de cuarenta expertos, que en estos días ya se están reuniendo en la sede de la PUCMM en Santiago de los Caballeros, representan la realidad de la isla – República Domicana y Haití-, del Caribe, de América y del mundo.